El pasado viernes Vacío presentó en Madrid su último disco "Sombras" junto a Symbiosis, una cita que nuestro redactor nonamed no quiso perderse.

¡Aquí os dejamos la crónica de la noche!

 

 

3 de noviembre. W.A.S.P. toca en la madrileña La Riviera, pero yo decido ir a disfrutar de Vacío, banda que he descubierto en su cuarto disco y de Symbiosis, banda que aún no tenía el gusto de conocer.

Sala Trashcan Music Club. O más bien bar. En un rincón, como si de un castigo se tratara, unos chavales ultiman los preparativos para el concierto. Eran Symbiosis, y tras una intro pregrabada de teclado dieron paso a una escasa hora de concierto para presentar su primer EP titulado "El Sonido de una Sombra”. Symbiosis reparten una mezcla de rock y metal que bebe muchísimo de la primera etapa de Sôber, no obstante incluyen en su repertorio una versión de “Cubos” pero a una velocidad mayor.

El grupo se defiende bien en el escenario demostrando mucha conexión entre ellos y aunque hay que reconocer que el ambiente no daba más de sí (tanto por el local como por la escasez de público) hicieron un trabajo lleno de profesionalidad y calidad.

Un apunte. El EP se vende en formato pendrive. No sé si es un acierto o no lo es. Lo que sé es que el grupo me gustó y yo iba dispuesto a comprarlo, pero no en ese formato, sino en el clásico CD. Nunca llueve a gusto de todos, y en mi caso, seguiré escuchándolos por Spotify. Pero si en algún momento deciden sacarlo en formato CD, yo seré uno de los compradores.

Poco iba a mejorar el ambiente con Vacío. Y reconozco que sí esperaba mayor afluencia de público, pero sólo una veintena de personas estábamos allí. En este caso lo que venían a presentar es “Sombras” pero que hicieron un recorrido por toda la discografía. También nos adelantaron el que va a ser su próximo single: “Laberintos”. De sonidos oscuros, pesados y de gran perfección, el grupo derrocha elegancia y profesionalidad por todos los costados. No obstante me llamaron la atención varias cosas. La primera la escasa duración del concierto (una hora). Lo otro es cierta falta de conexión con el público y un Carlos muy serio. Aunque quizás esa es la imagen que el grupo quiere dar acorde con la melancolía de las letras. Yo pienso en el viaje desde Murcia que se dan grupos así a tocar delante de veinte o treinta personas y lo admiro. Ojalá algún día sean recompensados como se merecen. Por cierto, ellos estuvieron allí entre el público disfrutando con nosotros del grupo anterior. Olé por vosotros.

Es cómodo cubrir este tipo de conciertos con tan poco público. Te mueves por toda la sala como si estuvieras en tu casa. Pero da lástima que no apoyemos este tipo de espectáculos. Y en este caso en concreto, Vacío estuvo todo el día de medio en medio publicitando el concierto. Cada vez estoy más desconcertado.

 

Crónica y fotos: nonamed.