Hoy os traemos algo distino, “Punk Cathedral”. Bajo ese título se esconde el excelente último trabajo de The Kiss That Took A Trip, proyecto de rock instrumental/ambiental que ha convencido a nuestro redactor Nui.

¿Queréis saber por qué?

 

 

Los proyectos solo band son tan comunes en el metal como los greñudos amantes del heavy, pero no es algo habitual solo de este estilo, también podemos encontrarnos con topo tipo de formaciones unipersonales en otros géneros musicales. Mostrando un interés intermitente en la producción rockera experimental, cruzarme por el camino con The Kiss That Took A Trip era cuestión de tiempo.

Adalid de la experimentación, el artífice tras la banda, M.D. Trello, lleva fortificando su seña de identidad desde hace una década, una clara muestra de optimización musical que genera versos y composiciones de carácter conceptual. Jamás reprimido en su interiorizada faceta artística, el músico español se ha empapado de la voluptuosa efectividad de lo alternativo. Cadenas y dogmas derrumbados trabajo tras trabajo, en una incesante búsqueda por lo sencillo y lo propio.

En este último álbum, el quinto de larga duración, continúa por la senda de la autoproclamación distintiva, una personalidad que no pretende emular los aires de pedantería que perturban la forma de ser de otros artistas impopulares, sino la construcción modélica y deliberada de sintetizaciones atmosféricas independientes.

Consumando cada tema con tonos característicos, la vanguardia de su música recurre a concepciones noventeras, riffs de post-rock y shoegaze de eterna juventud resonando en una nueva composición, el acompañamiento de la electrónica menos extravagante pero complaciente, la clamorosa ejecución vocal que despide susurros y tranquilidad con su canto y, lo que es más importante y que cabe destacar como virtud global, comprime con belleza una actitud positiva que rechaza la melancolía; de esta manera, “Punk Cathedral” es la pluralidad matizada de la instrumentación ensalzando pasajes agradables y amenos. Con esta misión como meta final, toda la actividad sonora del disco promete un acabado consistente y tierno.

Ejemplificando la libertad de expresión y de creación, las 14 canciones son dispares y encrudecen el afán de individualidad, ya sea por la críptica denominación de cada pieza, pasando por la naturalidad vinculante entre la sinfonía de primer y segundo plano, la distorsión ambiental, los repasos rítmicos de una batería personalizada, el oportuno piano apareciendo cual deus ex machina, y las sintetizaciones de futurismo añejo. Una macedonia melódica y elocuente de principio a fin.

Los 77 minutos de ofrenda musical dirigidos al espectador se convierten en una escucha idónea para encontrarse con una inusual propuesta, un regalo de un artista que cree en la música y no en la explotación capitalista de la misma.

 

Tracklist:

  1. Ambient Punk
  2. Kill the pole dancer
  3. Stabbing porcelain
  4. Dry swallowed pill
  5. Crapola
  6. Guitar pick chew
  7. Glorious racket
  8. Cook, Landis & Griffin
  9. Love + algebra
  10. Grounded
  11. Faulty logic can cost lives
  12. Braggadocio
  13. Yardmother
  14. Queen of the night shift

 

The Kiss That Took A Trip son:

M. D. Trello – Todos los instrumentos, voz

 

Nota: 8/10

Review realizada por Nui