El pasado viernes estuvimos disfrutando del directo de Reine y La Ley de Mantua en Madrid. Una estupenda noche de rock en vivo que hoy nonamed nos relata.

¡No os perdáis esta crónica!



Hay cosas que molan:

1 - Las croquetas de mamá.
2 - Un abrazo sincero.
3 - Que te inviten a un concierto a última hora.

No necesariamente tienen por qué ir en ese orden ehhh.

El caso el pasado 21 de enero no comí croquetas, pero sí fuimos invitados a un concierto bastante especial. En El Perro de la Parte de Atrás del Coche (sí, ese es el nombre de la sala) se estrenaban en directo Reine.

Pero antes que Reine, a las 22:00 empezaban a sonar La Ley de Mantua. La cuestión es que su actuación casi fue in extremis también, ya que sustituyeron a Erizo. La Ley de Mantua presume de un rock alternativo que lleva en activo desde 2011, con bastante más éxito del que se presupone, ya que tuvieron algún tema sonando en televisión e incluso estuvieron girando por México en 2017 y 2019. Y no sé si fue por la sala o porque yo no tenía mi día, pero reconozco que me gustan más en estudio. Porque este rock alternativo que suena en estudio, se me quedó en un pop rock con influencias de Héroes del Silencio. Fue algo muy extraño. Más guitarrero quizás, no sé. El caso es que luego les escuchas en casa y molan un montón.

El grupo venía a presentar su último trabajo, publicado en 2019 titulado “Seres Inflamables” y que os recomiendo de verdad. Pero… Fueron tan sólo cuarenta y cinco minutos, pero es que el concierto, a mi entender, empezó demasiado tarde.

Después de La Ley de Mantua, subieron al escenario casi sin descanso, Reine. A veces pienso si estamos ante una superbanda, a pesar de no tener nada publicado. El carismático guitarrista de Whisky Caravan a la voz, el batería y guitarra de Nomad, el bajo de Less y… a David Ramos, un tipo que ha pasado por bandas con tanto nombre como Skunk DF, Vita Imana o Dreamaker (la banda de Elisa C., cuando abandonó Dark Moor, que seguro que alguno lo ha olvidado). ¿Alguien da más?

Conocía de sobra las cualidades de Víctor Fraile, pero me fui muy sorprendido porque tiene una voz llena de versatilidad. Se atreve con temas de composición propia, pero también con versiones de Pearl Jam. En cualquier caso, creo que también me quedé falto de sonido en el grupo. La verdad es que tengo muchas ganas de que estos chicos publiquen su primer disco.

Respecto al público que llenaba la sala a eso de las 23:00, se le notó demasiada frialdad. Salvo al tipo de delante que se estaba intentando ligar a la rubia mientras sus dos amigos (y ella) querían ver el concierto.
No conocía la sala, y tampoco es que sea la más cómoda por la que hemos pasado. Y es que el escenario está detrás de la barra del bar. El sonido tampoco es el mejor del mundo y el escenario muy pequeño para bandas de cinco componentes.  Quizás es una sala más apropiada para tomar copas que para ver conciertos de rock. Aunque tiene un look muy elegante mezcla de modernidad, pero a la vez sientes que estás en uno de esos locales clásicos de la noche madrileña.

Sigamos disfrutando de la música en directo. Ya sea en salas como El Perro de la Parte de Atrás del Coche o en otras similares. En 2022, todavía superando la pandemia, ir a conciertos sigue siendo tan mágico como lo ha sido siempre.

Dales una oportunidad y si no te convencen, dales otra.

Crónica y fotos: Nonamed